El turrolate es un dulce típico de la Subbética cordobesa, en especial de Priego de Córdoba. Su origen se encuentra en la fértil imaginación de la industria artesanal confitera de Priego, posiblemente se empezó a elaborar a finales del siglo XVII. Está fabricado a base de chocolate /cacao y frutos secos. Tiene forma de barra cilíndrica y se fabrica en diversos tamaños y calidades.
Debemos resaltar diversas reseñas literarias que atesoran la fama de este típico producto prieguense fuera de nuestra localidad.
A finales del siglo XIX que Juan Valera en su novela Juanita la Larga nombra varias veces el afamado chocolate de bollo, de lo que se puede deducir que el escritor egabrense debía ser gran aficionado a degustar el genuino producto de Priego.
En un párrafo de la citada novela, el autor escribe de esta manera:
“Al día siguiente, decidido ya don Paco, acudió muy de mañana a casa de Juana la Larga y le mandó hacer seis hermosas camisas de madapolán con puños y pecheras de hilo, ajustándolas a treinta reales cada una. Para ganarse la voluntad y excitar el celo de ambas Juanas, les llevó don Paco, envuelto en un pañuelo, y sin que los profanos viesen lo que llevaba, un cestillo lleno de fresas, fruta muy rara en el lugar; y para mayor generosidad, sacó además del bolsillo del holgado chaquetón que solía vestir de diario, nada menos que tres bollos del exquisito chocolate, que solía hacer doña Inés en su casa, y del cual había regalado a su padre una docena de bollos de a cuatro onzas cada uno. Juana la Larga, que era muy golosa y muy aficionada a que la obsequiasen, aceptó el presente con gratitud y satisfacción, pero como no era larga solamente de cuerpo, sino que lo era también de previsión, y si vale decirlo así, de olfato mental, al punto olió y caló las intenciones que D. Paco traía y sobre las cuales había ya sospechado algo”.
Y es que el chocolate de bollo era considerado un producto tan preciado en aquellos tiempos, que servía hasta para conseguir los favores de la persona amada.
Juan Valera en su recreación literaria cita como el chocolate de bollo lo elaboraban en casa de Doña Inés hija de Don Paco, pero en otro párrafo de dicha novela donde nuevamente menciona el chocolate señala que había un hombre de Córdoba que expresamente iba a la casa a hacerlo. (Seguramente se debía referir al fundador de la empresa más prestigiosa de la localidad "Turrolate García" cuando iba a lomos de un burro por las aldeas y localidades limítrofes vendiendo el exquisito producto)
Nos encontramos pues con un producto que ha superado los límites de la gastronomía, que nos evoca aquellos años de nuestra niñez cuando merendábamos “Joyos de aceite con turrolate” con los que todos los prieguenses estamos sentimentalmente unidos, elevándolo a una categoría verdaderamente excepcional.
Fuente:
- Periódico Adarve
- Novela Juanita la Larga, autor Juan Valera.